Aunque C. Tangana y Rosalía sean las caras visibles, blancas, menos incómodas y más universales del boom de la música urbana española, hay chavales humildes de todos los orígenes que juegan en los barrios y en las redes con las variantes del español, con palabras del árabe, del portugués, del francés o con spanglish y otros neologismos, y que están creando un vocabulario que cala en la forma de comunicarse también del resto de jóvenes.
Quien haya tenido que esperar a que Morad aparezca en la prensa y la televisión generalista para saber quién es, seguramente no tendrá la más mínima pista de nombres como El Bobe, Skinny Flex, Ghetto Boy, Aiman Jr, El Patron y la 970, Crie 930, El Jincho, Bebegrande, Aya Ayat y una lista que asusta de tan larga de cantantes que acumulan millones de escuchas en Spotify.
En Reino Unido, Thony Thorne, director del archivo de jergas urbanas y nuevos lenguajes del King’s College of London, creó en su momento un diccionario del drill que reconocía que este subgénero del rap que ensalza la violencia y las pandillas callejeras ayuda a enriquecer de alguna forma el inglés. Del mismo modo, ahí van algunas palabras que marcan el lenguaje, en este caso el español, de los raperos y de los que consumen sus rimas. Con una diferencia con respecto a los anglosajones: que ellos llevan años mezclando idiomas y dialectos desde las periferias, o si no que se lo digan a Cypress Hill, M.I.A y un largo etcétera.
Barras
Tal vez sea difícil de aceptar, tanto para los guardianes de la vieja poesía como para los propios raperos, que lo que los músicos urbanos hacen es poesía, así que estos han decidido hablar de barras en vez de versos. Cuando escuches hablar de barras, no son ni cárceles ni metálicas, son los versos bien tirados.
Beef
Seguramente tiraera y frontear (ver entradas correspondientes) están convirtiendo la palabra beef en algo un poco de antaño, teniendo en cuenta que está más vinculado a los inicios del trap que al actual panorama musical, con más influencia del reguetón y del drill. Aunque beef viene de la palabra inglesa para bistec, se desconoce el porqué de esta denominación. Algunas revistas digitales de rap e hilos de Twitter remontan el significado de esta expresión a las memorias de un ladrón anónimo londinense del siglo XIX, mientras que hay quien dice que viene de las quejas por la carne de la Primera Guerra Mundial.
Bebé
Seguramente la expresión lleva sonando desde antes del reguetón en Latinoamérica, pero en España es este género el que introdujo esta forma cariñosa de dirigirse a la persona que quieres. No queda artista urbano ni persona enamorada menor de 40 años que no lo haya utilizado recientemente, y probablemente se lo debamos a la música latina. Pocos lo han usado más que Bad Bunny.
Bloque
Desde la Florida a las Tres Mil Viviendas, pasando por La Mina y Orcasitas, los barrios humildes que aparecen en casi todos los vídeos de la música urbana española tienen algo en común: grandes bloques de pisos. Allí, a veces con más de una familia en un mismo pequeño apartamento, es donde se labra la creatividad de estos jóvenes para ganarse la vida y para escribir y componer canciones. “Los bloques, la violencia, las facturas en la mesa, los amigos, las traiciones, la sangre en las aceras”, canta Ghetto Boy en ‘Generaciones’.
Feka
En el mundo de la música urbana hay un elemento que seguramente cuenta más que el éxito y el talento: la autenticidad. Si eres un genio de la lírica pero pareces estar fingiendo ser de la calle, es difícil que te hagas un hueco y, por muchas escuchas que tengas, esto no va a cambiar para algunos. Por eso, la palabra feka es uno de los dardos más dolorosos del panorama. Es una evolución de la palabra fake, falso en inglés, y acusarse de serlo es un clásico. Si no, que se lo digan a Crie 930, rapero de La Mina que le dedicó el insulto a un montón de raperos en la sola canción tiraera (ver entrada).
Flush
Palabra que da título al maravilloso libro Making flush, en el que se analiza la evolución de la música urbana en España. La palabra viene del árabe marroquí y significa dinero, especialmente monedas de poco valor. Se adaptó al español como felús en la época de dominación musulmana de España, para definir también a las monedas de poco valor. En la música urbana, se utiliza para hablar de hacer dinero.
Frontear
En un contexto lleno de envidias y ataques, reales o fingidos, entre artistas, frontear es encararse con otro rapero o trapero, dedicarle una canción o un vídeo de redes en el que le respondas a sus acusaciones o le ataques directamente.
Jai
También procedente del árabe, significa hermano, no necesariamente de sangre.
Joseando
La expresión, según Fundéu de la RAE, viene del inglés hustle, que significa prostituirse, ganarse la vida. Su origen está en Puerto Rico, pero cada vez se usa más entre los jóvenes españoles y el significado es bastante versátil. Estar por ahí joseando puede ser ganándose la vida o también vagueando, estar de arriba para abajo, haciendo tus cosas.
La L
El Combo la L es como se bautizaron Beny JR y Morad para hablar de su gente de L’Hospitalet. La 970, grupo de cantantes de drill con base en Madrid, son sus enemigos principales y se dedican a frontearse por las redes.
No face, no case
Sin rostro, no hay caso. La expresión viene a decir que si no tienen tu cara, puedes delinquir sin que te pillen. Es una de las claves de la performance estética del drill, subgénero más violento del rap en el que es habitual que sus protagonistas aparezcan con la cara tapada.
Pegao
Estar pegao es tener éxito.
Rambo
Es la forma de describir machetes de guerra (como los que tenía Rambo) y algunas canciones de drill le rinden verdadero culto. “Rambo en el pecho del jambo”, dice uno de los versos más emblemáticos y cuestionados de la canción de B10 ‘No que la vas a liar’.
Sapo
Hay algo peor que ser un falso en los códigos de barrio que maneja la música urbana, igual que las películas de mafias y barrios, y casi equiparable a ser policía: ser un chivato. Exponer a un compañero a las fuerzas del orden es el mayor de los pecados, y sapo es como se conoce a la persona que comete este tipo de actos. La expresión también viene de América Latina y es muy habitual en el narcotráfico.
Tiraera
Una tiraera es una canción en la que alguien “tira” a alguien, o sea, que le frontea, vamos, que le ataca directamente. Es común que una canción tiraera conlleve otra tiraera de respuesta, y así saldan cuentas los raperos, traperos y drileros entre sí.
Tombo
No es de las palabras más utilizadas en la música urbana, pero sí que muestra dos cuestiones: la necesidad de encontrar decenas de nombres a la policía (picolos, azules, monillos…) y el mestizaje del género. Por eso es curioso que un cantantes de drill de origen magrebí como el bilbaíno Aiman Jr pueda usar esta palabra de origen latino en sus canciones y en cambio alguien de origen español y catalán como El Bobe use el árabe hnusha en su canción ‘Ella’, donde introduce varias palabras de este idioma porque ha crecido con chavales marroquíes. La música urbana, al final, es la muestra de que en los barrios la mezcla cultural es mucho más profunda que entre las clases medias y altas.